La música tiene muchísimos beneficios. Además de expresar nuestros sentimientos más profundos, tocar un instrumento o cantar a todo pulmón, trae muy buen retorno de inversión a nuestras vidas. De lo que creemos y sabemos, es aún mejor para nuestra salud mental, espiritual y física. Según varios estudios realizados por la Universidad de Philadelfia en EEUU, algunos beneficios podrían ser:
Mejorará tu Memoria y funciones Ejecutivas
Varios estudios científicos han demostrado ya que tanto escuchar música como tocarla son prácticas que estimulan al cerebro y mejoran la memoria.
Asimismo, la ciencia también ha comprobado que tocar un instrumento musical puede incrementar el coeficiente intelectual, ¡hasta en 7 puntos!
Disciplina general
Todos los que han aprendido alguna vez a tocar algún instrumento saben que la disciplina es uno de los pilares del éxito.
Esto significa que, para crear sonido, es fundamental practicar todos los días. Esto hace que tocar un instrumento sea uno de los hábitos más recomendados para cultivar la disciplina y la capacidad de organizarse.
Menor estrés ante los problemas
La música es uno de los mejores remedios contra el estrés –esto lo han dejado en claro ya varias investigaciones–.
Así, ayuda a disminuir los niveles de cortisol, también conocida como la “hormona del estrés” y de un modo mucho más saludable que otras alternativas, como la alimentación excesiva, la ingesta de alcohol o el abuso de la televisión.
Se desarrolla la responsabilidad
Como ya mencionamos, todo instrumento musical demanda disciplina y mucha perseverancia. En otras palabras, tocar un instrumento exige tiempo, esfuerzo y mucha constancia.
Y si quieres avanzar en su estudio y destreza tienes que ser responsable por el tiempo que le dedicas. Además si quieres trabajar como músico debes ser constante en tu evolución, así te llamarán para los mejores trabajos de interpretación o grabación.
Mejorará tu coordinación fina y gruesa
Tocar un instrumento musical mejora la coordinación fina, pero también la gruesa. Leer partituras constituye un esfuerzo enorme, tomando en cuenta la cantidad de notas que has de leer por minuto, interpretarlas con tu instrumento (motricidad fina en caso de la mayoría de instrumentos) y tu cerebro simplemente responderá mejor a los impúlsos luego exigidos para otras tareas que requieren habilidades de coordinación gruesa.
Muchos bateristas y percusionistas, que dependen de su motricidad gruesa, también ven mejoras en su habilidad motora fina a lo largo del tiempo, algunos médicos, por ejemplo, que también son músicos, tienen una longevidad demostrable en sus habilidades motoras finas, con las cuales deben salvar vidas.
Desarrollo de habilidades sociales
También una gran ventaja del músico, es que sabrá siempre acoplarse al entorno social y logrará una mejor comunicación con sus compañeros porque simplemente su performance depende de ello.
Vivimos en un mundo donde cada vez son más las horas que pasamos frente a un computador o un teléfono móvil, pero pocas horas compartiendo en familia y con amigos tiempo de calidad.
El músico sabrá como armonizar y encajar mejor en un círculo social, porque reconoce el valor y la importancia del trabajo en equipo.
Además aprender música desde niños nos da ventajas notorias en habilidades numéricas, habilidades espaciales, geométricas, facilidad de resolver problemas, creatividad aumentada, imaginación abstracta, mejoras en habilidades de apreciación artística.
Si eres artista intérprete de la música, te invitamos a ser parte de la sociedad de artistas intérpretes de la música en Guatemala, MUSICARTES.