Hay un elemento determinante cada vez que pensamos en nuestros artistas favoritos: su vestimenta, su indumentaria: su imagen. 

Si pensamos en The Beatles, es imposible no imaginar al cuarteto de Liverpool con saco negro, camisa blanca, corbata negra delgada y corte de cabello como casco. Es una imagen clásica. La banda Kiss por ejemplo, no se puede pensar sin los colores negro y plateado de su estrambótica vestimenta, que sumada al maquillaje  le da a sus integrantes una imagen única.

Cuando escuchamos hablar de Pearl Jam, es imposible no traer a la mente la imagen de Eddie Vedder y compañía con el pelo largo,  pantalones cortos, botas, playera sin mangas o camisas de cuadros tipo leñador. Bandas a las que incluso parecería que no les importaba el mundo y sus modas, cuidaban muy bien de su imagen, el caso de Ramones con sus pantalones rotos y chumpas negras de cuero. Ni hablar de David Bowie, Marilyn Manson, Slipknot, Michael Jackson, Madonna, Lady Gaga,  etc.

En latinoamérica, los integrantes de Austin Tv, encontraron su imagen escondiendo su rostro tras máscaras y trajes espectaculares que variaban según el concepto de cada disco. Todo esto bajo el eslogan “tu cara no importa, importas tú”. Ni hablar de Caifanes o Soda Stereo, cuya imagen temprana estaba muy inspirada en Robert Smith de The Cure.

La imagen ha sido determinante para que los artistas puedan quedarse en la mente de sus seguidores y sin embargo, muchos músicos, sobre todo independientes, no le ponen mucha atención a estos detalles.

Esto en parte porque se ha diversificado mucho la moda que acompaña los géneros musicales y muchos optan por mantener una imagen sobria, basados en la lógica de no robarle  atención a la música. Lo cual es un razonamiento válido, pero en realidad, cuando una banda o artista sube al escenario o se presenta en una entrevista, los elementos de imagen marcan una diferencia que suma. Es un factor diferenciador.  

Algunos artistas guatemaltecos han entendido esto muy bien. Tal es el caso de Los Tiros, que en todos los conciertos salen con vestimenta e indumentaria específicamente diseñada para reforzar el carácter y estilo,  no solo de su música, sino de los personajes de la banda. El grupo maneja todo un concepto que funciona y no roba la atención a la música, por el contrario, hace de su show una experiencia más completa. Para quienes no los han escuchado, resulta imposible no posar sus ojos y su atención sobre ellos cuando los ven subir al escenario.

Otra banda es Malacates Trébol Shop, que tienen un clásico traje negro, de camisa blanca y corbata, que aunque ha sido usado por muchas bandas, por lo regular ésta imagen está relacionada con bandas del género ska.  Pero este traje le da una estética y personalidad a la banda sobre el escenario, esto es, definitivamente un extra en sus shows. 

Existen pequeñas cosas que se pueden hacer para empezar a construir una imagen que luego llame la atención, porque al final, somos seres visuales. El 80% de la información que recibe nuestro cerebro es visual, así que es muy probable, que te vean antes de escucharte. 

Aquí algunas ideas para tomar en cuenta: 

  • Todo es colores: Muchas veces los colores se definen de acuerdo al concepto del disco o de algún lanzamiento en particular. Regresando al ejemplo de la banda mexicana Austin TV, con cada disco la banda iba variando los colores de sus trajes y sus máscaras, lo cual además funcionó como un marcador de época o era. Otro ejemplo un tanto más cercano y con una acción más sencilla son Los Reyes Vagos, que en el concierto de lanzamiento del disco “18 Días” (2013), utilizaron la ilustración de la portada del disco en blanco y negro como fondo de escenario y los cuatro integrantes vistieron, dos completamente de  blanco y dos completamente de negro, tal y como salían en el videoclip del primer sencillo de esta producción. Parece poco, pero proyectaba una muy buena imagen.
  • Piensa el show en términos de imagen: Cuando se trata de conciertos importantes, no descuides la imagen, no solo tuya y de tus músicos, sino también de tu escenario. A veces cosas muy sencillas como ponerse de acuerdo con los colores de la ropa que usarán los músicos o adornos sencillos que puedan reaccionar a las luces del escenario, se logra una muy buena expresión. Hace unos días se presentó en el teatro Lux, la talentosa cantautora guatemalteca Dominique Hunziker y su escenografía le dio mucha vida al evento. Se trataba de unas cajas de palets con velas dentro y una serie de focos blancos. La imagen reforzaba el sentimiento y la vibra de la música, además iba perfecto con su imagen.  
  • Si son una banda, pónganse de acuerdo: Es verdad que muchos músicos y músicas tienen otros trabajos, pero también es verdad que a nadie le gusta ver a una persona con look de “oficinista” tocando la guitarra. La imagen en una banda fija una marca y aunque se quiere dejar todo a la libertad, el gusto  y a al sentido de la moda de cada quien, siempre se pueden encontrar puntos en común. Y esto suma.
  • Sé original: Es verdad que ya existen estéticas propias de cada género musical, sin embargo, siempre se puede encontrar una imagen que ayude a que tanto tu música como tu personalidad se proyecten. Quién no recuerda a Ricardo Andrade, cada vez que subió a un escenario lo hizo con lentes oscuros, grandes y exagerados, a muchos les gustaba y a muchos no, pero lo que sí es verdad es que era una imagen muy propia del líder de Los Últimos Adictos y es esa misma imagen de él, la vive en nuestras mentes.

Para los más puristas de la música, la imagen no es importante, pero en realidad sí lo es, vienen a la mente las palabras de Les Paul la primera vez que tocó “The Log”, la atractiva guitarra eléctrica que inventó:  “la gente también escucha con la vista”.