Hoy 26 de Abril, como cada año, se celebra el día internacional de la PROPIEDAD INTELECTUAL, el cual celebramos con este pequeño escrito, en donde trataremos de enfocarnos en la parte que como como artistas más nos interesa.

El escribir esta celebración a la PROPIEDAD INTELECTUAL fue una grata sorpresa, que en un principio me llevó a tratar de profundizar en los conceptos, sus significados, etimologías etc, pensando acerca de cómo plantear que es PROPIEDAD y que es INTELECTUAL dentro del concepto artístico-musical  y cómo combinados esos conceptos crean esta idea: como en la naturaleza íntima de la creación artística están relacionados el esfuerzo y la dedicación necesarios, para unir una serie de sentimientos e ideas y llevar ese esfuerzo intelectual-espiritual a una forma en la cual dentro del sistema en que se vive, pueda ser integrada a un soporte  el cual sea puesto a valor de mercado. 

En pocas palabras como UNA IDEA, UN SENTIMIENTO ARTÍSTICO se convierte en UN PRODUCTO que genera regalías a los propietarios de Derecho de dicha obra. Hoy se está celebrando como se han ideado procesos, como se han impulsado y aprobado leyes, como se han creado instituciones tanto estatales, gremiales y privadas, para poder hacer realidad que el creativo, que la persona o grupo de personas que sumergen su vida a una experimentación vivencial, para adquirir las herramientas necesarias para así poder crear un concepto artístico que genera de alguna u otra forma un beneficio económico, reciba lo que le corresponde.

Hoy estamos celebrando a los maestros que dedican su vida al perfeccionamiento del manejo de su instrumento y que puedan saber que su esfuerzo impregnado en un soporte pueda cosechar frutos. Que todos aquellos que invierten en llevar a la realidad la explotación comercial de las obras puedan tener herramientas para el retorno de su inversión, y  que los creadores que se inspiran y que arrancan de su ser esas notas y palabras, consigan no solo el reconocimiento social si no también el reconocimiento económico de sus obras.

Esto suena muy bonito pero en nuestras sociedades  puede haber cierta subestimación al material artístico y principalmente al material artístico creado en sus comunidades, en sus entornos inmediatos. Por lo mismo hay una negación a tomar como real el valor económico que puedan tener canciones u obras artísticas ya que en este ambiente de periferia global se suelen tomar a las creaciones culturales como algo que te encuentras tirado, como algo que vino del cielo y lo puedo tomar o como algo que se hace sin ningún esfuerzo e inversión. Pero en mi opinión esta idea de subestimar la CREACIÓN ARTÍSTICA principalmente la LOCAL no solo es de sociedades primitivas si no de sociedades dominadas, que no saben darle valor a los tesoros que poseen, el hecho de no reconocer y respetar la PROPIEDAD de quienes llevaron a la realidad ese concepto artístico que tantas veces utilizamos y tomamos como nuestro, demuestra una total falta de identidad y una falta de espíritu de agradecimiento a los creadores.

No puede ser posible que la sociedad permita que sus grandes CREADORES que sus grandes MAESTROS intérpretes de obras las cuales les han dado tanto uso y explotación comercial, tanto uso y explotación cultural, tanto uso y explotación sentimental, no reciban lo que les corresponda de toda esa explotación, de todo ese uso, de todo ese trasiego de ideas.

Permítanme darles un par de ejemplos de ese uso “comercial”…

Imaginemos un restaurante que los domingos al mediodía se prepara para atender decenas de clientes, los cuales saben que aparte de la calidad de la comida ahí servida estarán escuchando los temas que le encantan a la abuelita. Los clientes llegan, ordenan sus platillos favoritos, comen mientras la Marimba suena; la abuelita quiere bailar esa canción que tantos recuerdos le trae y la baila con su hijo mayor, mientras los nietos toman fotos y video con sus teléfonos para guardar recuerdos de ese hermoso día y enviarle estos a la familia que por el destino viven lejos. Al final de la jornada los clientes satisfechos pagan la cuenta y regresan a sus casas, el propietario del restaurante hace cierre y cuenta después de los pagos sus ganancias y se va a casa satisfecho, recordando que mañana tiene que renovar las licencias por el uso de la MÚSICA, lo cual hace con agrado, ya que sabe que la MÚSICA es clave para su negocio. El dueño del restaurante sabe que por medio de esta licencia la SOCIEDAD DE GESTIÓN COLECTIVA le reparte a los propietarios del derecho de las obras, interpretaciones o producciones,  lo recaudado, lo que lo llena más aún de satisfacción. 

Otro ejemplo… imaginemos al locutor de una radio que recibe constantemente llamadas solicitando los temas que sus escuchas prefieren. Tiene listas las canciones del siguiente bloque pero en la programación le indica que es hora de poner un bloque pero de anuncios, se anuncia una bebida gaseosa, se anuncia un desodorante, se anuncia un centro comercial y otro par de anuncios. Luego por fin empiezan los esperados temas, al otro lado de la ciudad una radio-escucha deja de hacer lo que está haciendo para acercarse a su aparato radiofónico y se pone a cantar a todo pulmón la canción que suena.

En ese mismo instante en otra ciudad, el gerente de la radio está orgulloso ya que ha facturado como nunca por el ingreso de dos clientes más y es consciente de que mañana tiene la visita de los representantes de la SOCIEDAD DE GESTIÓN COLECTIVA con quienes negocia la licencia que le permita pagar por el derecho a explotar comercialmente todo el catálogo musical  que utiliza; está consciente que la música es su materia prima y aunque es un rubro que no se tomaba en cuenta años atrás es consciente que los creadores de esas obras y producciones deben tener su parte proporcional de este negocio, teniendo claro que es la SOCIEDAD DE GESTIÓN COLECTIVA la encargada  de recolectar y repartir entre los dueños del derecho sobre los temas que utiliza las regalías correspondientes,  así que negociará de manera cordial y consciente.

Así  de importante es para nosotros la PROPIEDAD INTELECTUAL, tan importante como cualquier otro tipo de propiedad. Espero sus comentarios, dudas y aportes para enriquecer este blog que es para ustedes  y recuerden que debemos respetarnos como individuos y como sociedad, respetemos la PROPIEDAD INTELECTUAL, respetemos nuestra PROPIEDAD CULTURAL.

LUI DONIS

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