Aunque muchos decidimos la carrera de la música por salirse de la «norma» oficinista y todo lo que tiene que ver con trámites y formalismos empresariales, nos topamos en un punto de la carrera con una realidad: Somos empresarios.
De una u otra forma, nuestra carrera es un emprendimiento que requiere el mismo tratamiento que cualquier otra empresa. Además de estar sujetos a un sistema donde debemos responder tributariamente, debemos mantener una estructura financiera que facilite el orden y nos permita proyectar un futuro.
Las Crisis son inevitables
¿Quién iba a decir que una pandemia nos iba a encerrar literalmente y que los músicos íbamos a tener prohibido hacer presentaciones, ganarnos el pan de cada día como lo está haciendo esta crisis?
Hasta hace unos meses, era impensable que nuestra carrera iba a ser puesta en pausa por causa de una pandemia, sin embargo, muchos músicos estaban más preparados que otros.
¿Cuál es la diferencia entre estar preparado si evidentemente la crisis se extendió más de la cuenta? La respuesta está en la diversidad. Cuando consideramos nuestra realidad económica dependiente de una sola forma de ingresos, vemos que podemos utilizar nuestros recursos creativos para salir de las crisis inevitables y evitar una crisis financiera personal.
Personalmente siempre he creído en no guardar todos los huevos en una cesta, sin embargo alguna vez me enseñaron a quemar mis barcos detrás y lanzarme a esta aventura llamada música sin pensarlo mucho.
Ahora, los músicos que no hemos podido tocar nos hemos quedado con la esperanza de un regreso a escenarios, otros hemos visto imposible esperar a que el mundo entero solucione esta crisis con base en vacunas, curas o como la ciencia nos lo permita.
El Músico es Empresario
Ser Músico es ser un empresario astuto. La astucia que se requiere depende de la creatividad, de la adaptabilidad y sobre todo de la resiliencia que deriva de las crisis personales.
Así nos hicimos músicos, enfrentándonos a las mareas y tormentas que podrían venir, no sólo por que la mayoría nos formamos en países con pocas oportunidades, sino que nos hemos inventado por mucho el camino hacia nuestro propio éxito.
Las características de un músico son sumamente similares a las de un emprendedor. La mayoría hemos hecho carrera con la incertidumbre de un mañana a cuestas y con la presión de entregar y proveer a nuestras familias a pesar de tantas dificultades.
Estas características no sólo nos hacen mejores personas, sino también nos pueden preparar para enfrentar con ánimo y fuerza esta crisis que se ha prolongado por mucho tiempo ya.
Mentalidad y Estructura Empresarial
Si eres de los que han forjado una carrera, o eres de los que sueñan con dedicarse de lleno a la música, hoy la tecnología nos ofrece una gama de soluciones para monetizar y hacer cosas interesantes en nuestros países pero también en el extranjero.
He hablado varias veces de las formas de monetización que nos permite el internet, pero más allá de eso, debemos saber que necesitamos reforzar esa estructura y mentalidad empresarial para llegar a mejores latitudes en nuestra carrera.
Ahora quisiera compartirte un pequeño «check list» para que puedas visualizar qué tan preparado estas para enfrentarte a esta crisis o a las próximas que pudieran venir como músico y como empresario que eres:
Empresa Personal o Sociedad Anónima
¿Formas parte de una banda o conjunto musical? Lo ideal es formar una empresa, una sociedad anónima o como se le llame en tu país y poner las reglas en claro y en blanco y negro.
¿Alguien se sale de la banda por conveniencia personal? Entonces puede vender o donar sus acciones a los demás miembros. ¿Alguien es expulsado por alguna falta grave? o ¿Alguien está aduciendo que le pertenece el nombre o el logo, el lugar de ensayo, el amplificador, etc? entonces todas esas reglas deben quedar claras con un abogado en medio para que todos gocen de la seguridad.
¿Eres solista o dueño único del proyecto? Igual debes determinar si facturarás como un empresario independiente o una empresa como una sociedad para lo cual necesitas al menos un socio más.
Cada caso es diferente, pero mientras no se tengan claros los términos, no sabrás dónde estás metido.
Cuentas Claras, Amistades Duraderas
Si tienen una cuenta bancaria, monetaria o de ahorros o bien, tienen inversiones juntos (aunque sea un micrófono o un amplificador que se haya comprado con el esfuerzo del grupo) todo debe ser administrado por una persona muy responsable que entregue cuentas lo más claras posibles.
¿Eras enemigo de las matemáticas y de los números? mi mejor consejo es que te eduques lo más pronto posible para no tener desilusiones más tarde.
No hay peor razón para pelearse con tus amigos y compañeros que por cuentas confusas.
Responsabilidad Tributaria
Para todos es igual: la muerte y los impuestos son inevitables y si queremos un mejor país debemos ser responsables con nuestras responsabilidades tributarias.
Pero a los músicos se nos olvida y la mayoría prefiere que alguien más facture por ellos (que en Guatemala es delito) o bien, prefieren no entregar factura, que los convierte en ilegibles para una contratación o un patrocinio con una empresa formal.
Ser responsables con nuestro país y nuestras finanzas nos diferencian de los amateurs en la música. Si en verdad quieres verte profesional, debes tener orden en tus cuentas.
El orden como prioridad
Tener un orden y un calendario actualizado nos dará el poder de visualizar una ruta como empresarios. Pero también nos permitirá saber un poco el futuro de nuestra empresa, conocer los alcances y visualizar soluciones frente a cualquier crisis.
Pero ordenar la casa también nos permitirá saber si podemos emprender e invertir en cosas como mercadería o lanzar una gira virtual o presencial (en donde se pueda) para tener un retorno de inversión.
Proyectar a mediano y largo plazo también nos dará el ánimo que necesitamos para saber que saldremos de estas crisis.
Ahorro e Inversión
Y por último, tomando en cuenta el orden, podremos determinar si hay recursos para enfrentar crisis y saber si es necesario hacer otro tipo de búsqueda de oportunidades que aún no hemos visto como micro-empresarios.
¿Quizás podrías poner en renta algún equipo que no utilizan? o vender la camioneta que no han arrancado en meses, ¿Quizás hacer ajustes a las redes sociales, página web e instalarle una tienda en linea?
Estoy seguro que con la creatividad y con el deseo de superación, encontraremos soluciones que aún quizás no hemos visto para salir de esta y cualquier crisis.
Conclusiones
Déjanos sabes qué opinas, sería muy oportuno conocer tus expectativas de nuestra carrera y ver como podemos colaborar para hacer de esta industria, un campo para la siembra de buenas oportunidades para todos.